
Mery Avendaño y Alberto García, acudieron al parque deportivo para disfrutar de una tarde en familia. Los padres se encontraban jugando vóley y confiados dejaron a sus tres hijos sentados en una tribuna de madera.
El pequeño Denzel André (2), que era el menor de los vástagos de la pareja, se levantó de su asiento, ya que su biberón se le había caído y rodó debajo de la camioneta estacionada cerca a la tribuna.
Hernán Quispe Condori (31), quien se retiraba junto a su familia del complejo deportivo, abordó su camioneta y a los pocos minutos la puso en marcha. Los gritos de los testigos alertaron al conductor, quien siguió avanzando con su camioneta y aplastó al pequeño, cuya muerte fue instantánea.
Al lugar acudió un patrullero de la comisaría de Bayóvar y luego el fiscal, siendo el sujeto trasladado a la comisaría, donde quedó detenido. Allí se comprometió a ayudar a la familia con el sepelio y entierro de la criatura
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